Ingredientes:

5 o 6 cabezas de ajo
4 hojas de laurel
12 granos de pimienta negra
1/2 litro de aceite de oliva

Lavar muy bien los ajos y las hojas de laurel.

Separar los dientes de ajo.

Blanquearlos en agua hirviendo durante 4 minutos.

Retirarlos del fuego y sumergirlos en agua fría.

Pelarlos con las manos y secarlos con un repasador.

Ponerlos en una cacerola de fondo grueso, agregar el aceite, los granos de pimienta y las hojas de laurel. Cocinar al mínimo (sin que el aceite hierve)durante 1 hora. Apagar el fuego, sacar los ajos de la cacerola y ponerlos en un frasco esterilizado. Taparlos.

Calentar nuevamente el aceite, y verterlo dentro de los frascos dejando 2 cm libres en la parte superior.

Colocar la tapa.

Esterilizar durante 20 minutos y dejar enfriar.